La aptitud de víctima es una condición muy fácil de asumir y nos coloca en un sitio de conformismo. Para poder avanzar es necesario tomar en consideración ciertos puntos:
Asume tu responsabilidad
Nadie es culpable de lo malo que te pasa, quizá tú tampoco en ocasiones lo seas de! todo, pero siempre será tu responsabilidad y decisión el salir adelante o quedarte lamentándote de tu desgracia.
Influencia de la sociedad
De manera inconsciente absorbemos pensamientos y costumbres del entorno que nos rodea, y es inevitable; sin embargo, tienes el poder de tomar las cosas que te sirven y son útiles para tu vida, y dejar de lado aquellas que te frenan, como los complejos y prejuicios.
Tienes más poder del que crees
No se trata de gobernar al mundo, sino de entender que eres dueña de tus actos y escritora de tu destino. Atreverte a romper esquemas y perseguir tus sueños.
El peso de tus pensamientos
Conforme pasan los años, nos vamos programando para actuar y responder casi de manera automática ante todas las situaciones. Es importante analizar tus vivencias y cómo has respondido ante los problemas y tus logros. Haz una pausa y piensa si ha sido lo correcto o lo que esperabas de ti misma. Una vez que obtengas las respuestas, ‘reprograma’ tu mente y date la oportunidad de integrar nuevos pensamientos a tu vida.
No hay límites
Se refiere al hecho de que en realidad no conoces tus límites, así que es importante descubrirlos aventurándote a hacer nuevas cosas, despojándote de pensamientos negativos y la actitud de víctima. Nunca sabrás de qué eres capaz si no lo intentas.
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